Los filtros del coche son elementos de vital importancia, una de las principales claves para mantener el buen estado de un vehículo. Hay que cambiarlos bajo una serie de patrones y periodicidad que aseguren su funcionamiento básico y sigan realizando su función como es debido. Porque son los encargados de evitar que lleguen todo tipo de impurezas que al motor. Además su precio es relativamente bajo y las consecuencias de no cambiarlos pueden ser notables.